El viernes el ministerio de Economía ingresó en el Congreso el Presupuesto para 2024. Si bien se acordó posponer la discusión y su tratamiento hasta después de los comicios de octubre, el proyecto nos adelanta información.
Martes 19 de septiembre de 2023, Mg. Yanina S. Lojo
Como estaba establecido el día 15 de septiembre el ministerio de Economía presentó en el Congreso el proyecto de ley para el Presupuesto Nacional 2024. Los días anteriores hubo mucho debate sobre si correspondía o no su presentación, teniendo en cuenta que aún no queda claro quien administrará desde el 10 de diciembre y que podría quedar condicionado por un Presupuesto que no ha elaborado. Por lo que, se acordó suspender su tratamiento hasta después de los comicios para que haya mayor claridad sobre el futuro. La pregunta más interesante que podemos hacernos es: ¿Qué plantea el equipo económico actual para el próximo año teniendo en cuenta la situación actual?
El tipo de cambio oficial
Según estiman desde el equipo económico, como se había acordado, el tipo de cambio permanecerá congelado hasta mediados de noviembre. Después el BCRA retomará su política de crawling peg y de esa manera el peso guardará una relación con el dólar de $367 a USD 1 para diciembre de este año.
De cara a diciembre 2024 el ministerio de Economía espera que el tipo de cambio se ubique en los $607. Obviamente, es una proyección muy optimista en función de la realidad económica del país.
Si nos remontamos al Presupuesto para 2023, el dólar proyectado para diciembre era de $270. En otras palabras, casi $100 más de lo que terminará y bastante lejos de lo que cotiza hoy ($350.-)
La inflación
Mucho debate hay entorno a esta variable, en particular después de que el viceministro anunciara que desde Economía iban a publicar sus propios datos de manera semanal a fin de ir mostrando que el dato de agosto respondió a un ajuste especial por la devaluación y que se observa una desaceleración durante septiembre.
Según las actualizaciones realizadas 2023 terminaría con una inflación del 135%. Lejos de la meta del Presupuesto que ubicaba este dato en el 60%. Para 2024, el índice se ubicaría en el 70%.
Los privados tienen su propia opinión con respecto al dato de septiembre y para 2023. Con respecto a las estimaciones para fin de año, la inflación se ubicaría en el 169%. Con relación al dato septiembre, que se conocería a mediados de octubre, se espera que nuevamente se ubique en los dos dígitos, quizás un poco más moderado que el conocido la semana pasada. Nuevamente, hay un rango de dispersión en los datos de los consultores que va desde el 10% al 13%.
La actividad económica
En el Presupuesto 2023 se había proyectado un crecimiento de la actividad del 2%, sin embargo, las correcciones presentadas plantean una caída del 2,5% del PBI. Pero para 2024, esperan una recuperación del 2,7%.
Déficit Fiscal
Según lo que se acordó con el Fondo Monetario Internacional este no puede superar el 1,9% del PBI. Con la suma de medidas anunciadas en las últimas semanas con un costo superior a los $3 billones. Cuesta imaginarse que se pueda logar el objetivo. Pero el equipo económico cree que mediante la generalización del Impuesto PAÍS, el crecimiento de aportes y contribuciones, y la inflación podrán financiar estas medidas. También se adelantó que la quita de subsidios a las tarifas continuará según lo pautado con el organismo internacional.
El escenario se complica de cara al año próximo dado que según lo acordado con el FMI la meta fiscal debe ser del 0,9% del PBI. El proyecto de ley presentado adjunta un apartado donde se incluyen una serie de gastos tributarios y algunos beneficios que, de ser eliminados por el Congreso, lograrían un recorte de 4,7 puntos del PBI. Si se logrará la aprobación y su ejecución se trataría de obtener como resultado un 1% de superávit.
¿Qué pasará con el Comercio Exterior?
El Impuesto País para las importaciones se incorpora en el texto del presupuesto, lo cual representa una mala noticia para los operadores porque de esta manera, parecería que quedaría vigente. También los funcionarios dieron a entender que el esquema de las SIRA permanecería vigente y se recurriría al mismo como un mecanismo para ajustar cuestiones cambiarias.
Se proyecta un crecimiento de las exportaciones del 7,1%. Mientras que importaciones sólo se incrementarían un 2%. Se buscaría de esta manera alcanzar un superávit comercial
Al mismo tiempo, se consideran que por derechos de exportación – ante la recuperación, después de un duro año de sequía -, se obtendría una suba de 0,8 puntos del PBI. Por lo que, de esta manera se responde la pregunta sobre qué postura tenía el oficialismo con respecto a las retenciones. Más allá de la eliminación de los derechos para algunos sectores, no hay voluntad por lo menos para el próximo ejercicio de avanzar con la quita. Por ahora.
La versión del equipo económico
Según indicaron desde el equipo económico la proyección de las variables económicas marcan “senderos nominales para todas las variables”. En otras palabras, son cálculos para poder estimar ingresos y egresos en el Estado.
Nuevamente, las explicaciones que llegan desde Economía por los desvíos en las proyecciones son resultado de la falta de dólares, el déficit fiscal y la inflación (suba de costos en distintos productos) como consecuencia de la sequía que represento una caída en los ingresos por exportaciones estimado en uso USD 20.000 millones.
La realidad es que, dado que la discusión del proyecto queda pospuesta hasta después de los comicios, este proyecto podría cambiar radicalmente dependiendo del resultado electoral. Lo más probable, como suele suceder, es que se termine aprobando de manera urgente hacia final del año.
Por ahora, si bien desde Diputados han estado trabajando, y pasando proyectos de ley hacia Senadores, no ha habido avances desde esta Cámara. Por ejemplo, el tratamiento de la ley de alquileres que se iba a llevar adelante esta semana se pospuso dado que hay miembros enfermos.
Más allá de los números que se proyectan en el Presupuesto con respecto a las metas para diferentes variables macroeconómicas, la realidad muestra es que durante su ejecución se producen desvíos significativos. Es una hoja de ruta, pero no implica que no se tomen atajos, aunque no garantizan llegar al mismo lugar ni en las mismas condiciones.
Cada candidato tiene una idea de gobierno diferente y de allí se desprenden diferentes planes económicos. En ese contexto, puede que las proyecciones que se hacen hoy en diciembre de 2024 resulten anecdóticas.
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