El viernes el BCRA presentó un informe elaborado a base de la información recolectada por el empadronamiento. ¿Qué nos dice? ¿Qué pasa con la ventana que se abrió para muchas PYMES? ¿Y cuál es el futuro?
Lunes 29 de enero de 2024, Mg. Yanina S. Lojo
Con la presentación del “Informe de la Deuda Externa Privada” el Banco Central actualizó la información sobre la situación de la deuda por operaciones de importaciones de bienes y servicios. En el mismo, informó un stock de deuda comercial de importadores de bienes y servicios de USD 53.365 millones, al 30 de septiembre de 2023 basado en el Relevamiento de Activos y Pasivos Externos.
¿Cuál era el stock de deuda?
Según indica el Banco Central, incorporando a este stock la diferencia entre lo importado y lo pagado en el mercado de cambios hasta el 12 de diciembre, fecha en la que se hizo el corte, la deuda de importadores de bienes y servicios habría alcanzado un total de USD 57.800 millones a esa fecha.
Sin embargo, desde el 31 de diciembre 2021 hasta el 12 de diciembre de 2023 se registró un incremento del stock de deuda de los importadores por USD 27.400 millones.
¿A qué se debe el incremento de la deuda?
Según señala el Banco Central “El aumento de deuda comercial durante 2022 y hasta 12 diciembre 2023 de USD 27.400 millones informado por el BCRA equivale a un alza de 90% en menos de dos años, y desconoce precedente histórico.”
Y agrega “Ese ritmo de endeudamiento se originó a partir de los incentivos desalineados del régimen cambiario vigente en ese periodo que, a través de la venta de reservas internacionales del BCRA, se orientó a preservar un tipo de cambio visiblemente atrasado en términos reales. Ante la demanda excesiva de importaciones por parte del sector privado la autoridad monetaria recurrió a la creciente imposición de restricciones de acceso al mercado libre de cambios para los importadores, impulsando de esta manera el incremento de la deuda comercial mencionado.”
De esto último, los importadores pueden dar un amplio testimonio: plazos de acceso que cada vez se hacían más largos, fechas que cambiaban constantemente y la tortura final: la Cuenta Corriente Única de Comercio Exterior (CCUCE) y su sin fin de errores que llevó a que de agosto a diciembre fuera prácticamente una epopeya realizar un giro.
¿Qué información se ha podido recopilar con el empadronamiento?
Con el cierre del plazo Declaración Jurada de Deuda de Importación (DJDI) el Ministerio de Economía dio a conocer los resultados del Padrón de Deuda Comercial por importaciones con Proveedores del Exterior.
Según lo informado, en el Padrón se registró un total de deudas netas por USD 42.600 millones. Pero también se declararon pagas sin acceso al mercado de cambios operaciones por unos USD 8.500 millones.
¿Cuál es la carga de la deuda estimada por Economía y el BCRA?
Mediante el cruce de información se llegó a la conclusión de que “la carga financiera actual de deuda por importaciones de bienes y servicios sería de USD 15.200 millones menos de lo estimado en base a las fuentes disponibles con anterioridad.”
Asimismo, confirmó lo que desde el sector privado se ha estado mencionando desde hace varios meses: la deuda comercial está fuera de los parámetros en los que normalmente opera la economía.
Según el informe de la autoridad monetaria “la deuda comercial de importadores que excede el monto habitual con el cual opera la economía seria de aproximadamente USD 13.600 millones.”
Concluye de esta manera que: “la demanda por moneda extranjera necesaria para normalizar la carga de deuda comercial de importadores resulta ser menos de la mitad (el 47%) de la que se estimaba (unos USD 28.800 millones)”
¿Qué pasará con la deuda?
Como hemos mencionado la semana pasada (Ver artículo “Un alivio para las PYMES para el stock de deuda”) aquellas que hayan registrado en el empadronamiento un pasivo inferior o igual a USD 500.000 y sean PYMES desde el 10/02/2024 podrán acceder al mercado siguiendo un esquema escalonado entre febrero y abril para cancelar la misma.
Esto significa un alivio para muchísimas PYMES que podrán cancelar en los próximos dos meses toda su deuda con el exterior sin tener que recurrir a otras herramientas.
¿Qué paso si no declaré la deuda?
No es una pregunta poco habitual. Muchas empresas por desconocimiento o por falta de asesoramiento no llegaron a cargar la DJDI y hoy se encuentran ante la dificil situación de que no pueden acceder al beneficio. Aún con deudas inferiores a los USD 500.000. Estos casos se repiten mucho entre los que operaban con servicios, o importaban por courier. Tampoco se sabe aún que pasará con las operaciones declaradas con dólares propios que no se pudieron pagar. ¿Habrá algún tratamiento especial?
¿Qué pasa con aquellos que exceden los USD 500.000?
Muchos se preguntan si declararon deuda por USD 510.000 pueden acceder por los USD 500.000. Por ahora, la respuesta parece ser que no. Que USD 500.000 funciona como corte. Y quienes se encuentra por encima, deberán suscribir BOPREAL Serie 1 o Serie 2.
¿Qué pasa si ya suscribí BOPREAL Serie 1 por parte de la deuda?
Si lo declarado no supera los USD 500.000 se entiende que se podrá acceder al mercado para pagar aquello por lo que no se ha suscripto. Pero aún quedan puntos por aclarar al respecto. Recordemos que aquellos que suscriban hasta el 31/01/2024 un monto igual o superior al 50% de la deuda declarada, tendrán acceso al MULC para pagar hasta un 5% de lo suscripto.
¿Cuándo será la próxima licitación?
Según informó el Banco Central se realizará finalmente, la última licitación del mes, este martes y miércoles.
¿A qué tipo de cambio pagaré las operaciones nuevas?
Siempre refiriéndonos a las operaciones que se cursen en en el MULC el tipo de cambio oficial – siempre el que corresponde a las operaciones de comercio exterior -, vigente al día de la fecha que se produzca el acceso al mercado de cambios.
¿Estos accesos quedan alcanzados por el Impuesto País?
Por ahora, y mientras no se expidan de lo contrario, sí. Habrá que pagar el Impuesto País a la alícuota vigente al momento de la liquidación. Obviamente, se tendrá en cuenta el pago a cuenta realizado.
¿Qué pasa con las operaciones nuevas?
Esa es la pregunta que le quita el sueño a muchos productores, industriales e importadores. Porque, aunque han logrado negociar con sus proveedores por lo adeudado el problema llega a la hora de planificar nuevos embarques. ¿Cómo pagar? Hoy sigue siendo únicamente pago diferido, y esta no es una opción para la mayoría de las empresas. Quienes o no tienen crédito o lo han perdido por lo vivido durante todo 2023.
La posibilidad de comprar un bien de capital y pagarlo a plazo en cuatro cuotas a 120 días de la nacionalización es imposible. ¿Qué debe hacer un industrial al que se le rompe una maquinaria? ¿Cómo hace para seguir produciendo? Como ese caso, podemos enumerar miles. Porque esa situación se repite a lo largo y lo ancho de la economía. No es sólo un problema de algunos.
La situación de las reservas es compleja, y los dólares frescos no llegan, pero es vital que a medida que la cosecha empiece a liquidarse y empiecen a llegar dólares de las exportaciones se hagan algunas concesiones con relación a los pagos.
Muchos tenían sus esperanzas puestas en el blanqueo y una posibilidad de que esos dólares que ingresaran pudieran utilizarse para pagar operaciones de importación. Sin embargo, la decisión del ministro de Economía ha sido eliminar el paquete fiscal de la Ley Ómnibus lo que deja esta opción, por ahora, fuera del espectro.
Puede que las autorizaciones se hayan agilizado, puede que los reglamentos técnicos se estén agilizando e incluso simplificando, puede que la apertura del comercio sea el norte, pero mientras persistan los problemas para pagar el comercio estará más que complicado. Ojalá que la economía se estabilice lo antes posible, para que el acceso al mercado se vaya simplificando y el comercio exterior pueda despegar. La Argentina necesita hoy más que nunca que todos los engranajes estén funcionando para llegar a buen puerto. Hemos tomado el timón, las decisiones que se vayan ejecutando definirán el destino que tomará el futuro.