Seguimos con las cripto

Continuando con el tema de las criptomonedas, este jueves hablamos de algunas de las más populares del mercado.

Jueves 29 de septiembre de 2022, Mg. Yanina S. Lojo

Hace dos semanas atrás en el artículo Conceptos claves para comprender las criptomonedas (Parte I) empezamos a explorar las primeras nociones sobre el mercado de las cripto y en Conceptos claves para comprender las criptomonedas (Parte II) profundizamos y ampliamos más conocimientos relevantes. También nos adentramos en el mundo del bitcoin. Hoy vamos a hablar de las otras monedas más conocidas.

Ethereum (Ether)

Técnicamente Ethereum es el nombre de la blockchain y Ether es la criptomoneda que opera en dicha cadena. Algunos la denominaban una cadena inteligente, también suele resaltarse la sofisticación de la tecnología que utiliza esta blockchain que permite soportar todo tipo de apps. Fue creada en 2015 por Vitalik Buterin pensando en un instrumento para aplicaciones descentralizado y colaborativo.

Ether está pensada no sólo para ser negociada como activo, sino que además como plataforma de pago, a través de Ethereum. Es la segunda moneda más importante después del bitcoin. Al igual que este usa un libro compartido donde se registran todas las operaciones y es de difícil modificación una vez que algo queda asentado.

Los mineros que trabajan con esta criptomoneda deben verificar las operaciones para poder generar un bloque y codificarlo a través de la resolución de complejos algoritmos. Estos nuevos bloques se van enlazando con los ya existentes y el minero recibe una recompensa en forma de tokens de Ether.

En los últimos días se completó "The Merge", la fusión de Ethereum a un sistema Proof of Stake. De esta manera, se reducirá sustancialmente la cantidad de computadoras necesarias para poder mantener en funcionamiento la cadena. Esto implica una fuerte disminución en el gasto de energía que requiere la minería. Algunos analistas consideran que esta decisión tendrá un efecto negativo en el Bitcoin que pareciera no tener el mismo nivel de coordinación que tiene Ether para poder migrar y de esa manera reducir el impacto ambiental.

Fuente: Binance.com

Ripple XRP

Es una moneda de utilidad - es tanto una moneda como una plataforma -, que tiene como principal objetivo facilitar a través de su sistema las operaciones de transferencia. Desde su lanzamiento fue apoyada por varias instituciones bancarias, por lo que muchos creen que el crecimiento de sus operaciones a través del tiempo hace pensar que podría terminar siendo absorbida por el sistema financiero.

A diferencia de bitcoin, no hay blockchain sino que para verificar y asegurar las operaciones hay un algoritmo del consenso de protocolo de Ripple (RPCA). Esto requiere que cada nodo que intervenga esté de acuerdo. Para que funcione se debe llevar adelante tres etapas:

1. Luego de una operación, el primer nodo la valida automáticamente a fin de reunir un conjunto de estas y poder avanzar a la siguiente etapa.

2. Las transacciones se trasladan a los siguientes nodos que deben votar. Aquellas que reciben mayoría de OK avanzan mientras que las que no, quedan reservadas para la siguiente ronda.

3. Las operaciones que obtuvieron el OK pasan al siguiente nodo para ser almacenadas en bloques, donde se enlazan con los ya existentes.

Al igual que en el caso del Ethereum su moneda recibe el nombre de XRP. Este token es el que permite el intercambio dentro de la plataforma Ripple. Esta y Ripple Labs crecían con fuerza hasta diciembre de 2020 cuando fue denunciada por la Comisión Nacional de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC). Se está exigiendo que se defina si XRP es una moneda o un valor, dado que se piensa que se habrían realizado ventas de valores sin tener licencia para hacerlo. Asimismo, se considera que la empresa dueña habría manipulado las operaciones para hacer subir o bajar el precio de XRP y así generar enormes ganancias. En febrero de 2021, llegó la segunda denuncia de la SEC. El litigio aún continua y mientras algunos creen que nada de esto avanzará otros temen que el gran brazo de la ley, que ejerce la Comisión de Valores, no ceda.

Fuente: Binance.com

Litecoin

Es una criptomoneda que fue creada con el objetivo de hacer más rápidas las operaciones P2P y por ello, sus creadores consideraban que podía ser un rival muy fuerte para el bitcoin. El objetivo inicial era que fuera utilizado para el pago de servicios y bienes. Su tecnología es la misma que la del Bitcoin, inclusive sigue muy de cerca las modificaciones que se realiza en ésta para poder aprovechar las innovaciones tecnológicas y aplicarlas. Pero tiene diferencias con la criptomoneda líder entre las que se puede enunciar: el tiempo en que se procesan los bloques - lo hace en 2,5 minutos -, la producción total que se espera que sea 4 veces mayor que la de Bitcoin (84 millones de litecoins aproximadamente) y utiliza una función scrypt - esto hace que se requiera equipos más simples para la minería.

Fuente: Binance.com

NEO

Presentada en 2014, tenía como principal objetivo mejorar Ethereum - por lo cual posee las mismas características generales -, funcionando con una política de consenso. Es tanto una moneda como una plataforma y fue la primera criptomoneda china. Antes se llamaba AntShares, y así misma se definía como plataforma de aplicación descentralizada de blockchain con código abierto. En este caso, el algoritmo descentralizado que se utiliza recibe el nombre de Delegated Byzantine Fault Tolerant (dBFT) por ello se define como un mecanismo de consenso que acepta fallos bizantinos. Tiene varias ventajas como el hecho de que no admite operaciones en paralelo ni la cancelación de las transacciones una vez enviadas. Es una red que procesa muy rápido, posee un alto nivel de protección ante cualquier tipo de piratería. Sus creadores apuntan a la creación de un ecosistema orientado a la economía inteligente. Su algoritmo de consenso permite una mayor escala de operaciones y, finalmente, soporta los lenguajes de programación más populares.

Fuente: Binance.com

IOTA

Fue creada en 2015 con la idea de desarrollar una moneda orientada a atender las necesidades de Internet of thing (IOT) Su enfoque simple hizo que se volviera rápidamente en una criptomoneda utilizada para las micro operaciones. No requiere de una cadena de bloques, sino que se basa en una estructura de datos que utiliza el gráfico acíclico directo (DAG). Esta tecnología hace que puedan realizarse micropagos sin costos adicionales. Lo que se busca es combinar dispositivos electrónicos y objetos con acceso a la red y que estos se centralicen en una sola red.

Fuente: Binance.com

Hay muchísimas más monedas dentro del universo de las criptomonedas, y muchos más conceptos para desarrollar. Pero eso, quedará para la próxima semana.